Una preocupación habitual en los técnicos es saber si su multímetro "marca bien"... Bueno, por mi práctica diaria puedo decir que sí —si no están averiados—, que marcan bien... aproximadamente.
Este "aproximadamente" ya viene de fábrica, de nuevo. Un multímetro de 3 1/2 dígitos, puede tener un 0,05% de precisión y 5 dígitos de "ruido" que afectan al último dígito (o resolución, el valor más bajo de la escala). Aplicando las fórmulas no da que una medida de 100,0 V puede estar entre 99,5 y 100,6: ¡más de 1 voltio!
O sea, no hay manera de saber si "marca bien" porque arrastramos errores. La única manera de saber si "marca bien" es llevarlo a calibrar (¡no calibrarlo en casa!) a un Laboratorio. Calibrar quiere decir, no ajustar, sino ver que medidas da comparado con un patrón de nivel superior (calibrado, a su vez, contra un patrón de nivel superior). Esta cadena ininterrumpida de calibraciones se llama trazabilidad (traceabilidad en hispano) y produce una acumulación inevitable de pequeños errores cuantificados.
Dicho esto, lo llevamos a calibrar a un Laboratorio y nos entregan un Certificado en el nos indica el resultado de la comparación, pero hay dos tipos de Certificados:
a) El Certificado puede decir que cumple (ay, o "pasa") las especificaciones del fabricante y puede tener ese 1,1 V de margen... o sea vamos vendidos igual.
b) Otro tipo de Certificado (más caro) nos indica las medidas obtenidas, así, diría que los 100,0 V aplicados nos marca 100,1 V. Bueno, con esto ya vamos mejor ¿porqué? Porqué su patrón no le suministra 100,0 V sino 100,00000X: ¡8 1/2 contra 3 1/2! Con esto puedes tener la certeza absoluta de que si te dicen que 100,0 son 100,1, lo son.
¿Qué solución hay para no tener que llevarlo a calibrar (una calibración puede costar más que el propio multímetro) y saber si marca bien?: ninguna. Hay que comprar un instrumento de nivel superior (con más dígitos) y con menos error.
Este "aproximadamente" ya viene de fábrica, de nuevo. Un multímetro de 3 1/2 dígitos, puede tener un 0,05% de precisión y 5 dígitos de "ruido" que afectan al último dígito (o resolución, el valor más bajo de la escala). Aplicando las fórmulas no da que una medida de 100,0 V puede estar entre 99,5 y 100,6: ¡más de 1 voltio!
O sea, no hay manera de saber si "marca bien" porque arrastramos errores. La única manera de saber si "marca bien" es llevarlo a calibrar (¡no calibrarlo en casa!) a un Laboratorio. Calibrar quiere decir, no ajustar, sino ver que medidas da comparado con un patrón de nivel superior (calibrado, a su vez, contra un patrón de nivel superior). Esta cadena ininterrumpida de calibraciones se llama trazabilidad (traceabilidad en hispano) y produce una acumulación inevitable de pequeños errores cuantificados.
Dicho esto, lo llevamos a calibrar a un Laboratorio y nos entregan un Certificado en el nos indica el resultado de la comparación, pero hay dos tipos de Certificados:
a) El Certificado puede decir que cumple (ay, o "pasa") las especificaciones del fabricante y puede tener ese 1,1 V de margen... o sea vamos vendidos igual.
b) Otro tipo de Certificado (más caro) nos indica las medidas obtenidas, así, diría que los 100,0 V aplicados nos marca 100,1 V. Bueno, con esto ya vamos mejor ¿porqué? Porqué su patrón no le suministra 100,0 V sino 100,00000X: ¡8 1/2 contra 3 1/2! Con esto puedes tener la certeza absoluta de que si te dicen que 100,0 son 100,1, lo son.
¿Qué solución hay para no tener que llevarlo a calibrar (una calibración puede costar más que el propio multímetro) y saber si marca bien?: ninguna. Hay que comprar un instrumento de nivel superior (con más dígitos) y con menos error.
Última edición: