Lo que pasa es que el tiempo no pasa en balde.
Aún cuando se guarde envuelto en algodones el aparato tiene componentes que se siguen envejeciendo.
- Condensadores electrolíticos que se secan y pierden capacidad.
- Grasa reseca, que en lugar de favorecer el deslizamiento o engrane de piezas mecánicas, realiza la función contraria entorpeciendo el buen funcionamiento.
- Correas (si las tiene) de arrastre que cogen forma, se deforman o deshacen con el tiempo.
- Fallo por suciedad de los pulsadores.
Puede ser diversas las causas de los fallos y esos aparatos eran complicados de reparar cuando no se tenía una práctica de tiempo, aún sabiendo de electrónica.