Historia del Audio en Argentina

Esta mañana estaba revolviendo basura en el trabajo y encontré esta "fuente de alimentación" de +/-15V y de 1977 que estaba en el tacho de la basura. La rescaté y le pregunté a los tíos que la estaban descartando si me la podía llevar, a lo que me contestaron que me la llevara así trabajaban menos :oops: (y)(y)
Me la llevé y encontré esto:

Ver el archivo adjunto 275874

Los capacitores son Siemens de 1974 y de 5000uF x 35V (brasileños), pero los diodos no se pueden leer...veré que sucede cuando los quite del PCB. Todo el cachivache es de 1977 :oops: :oops: :oops:
Todo es muuuucho mas viejo que lo que conseguí en el museo...habrá que ver si funcionan o ya se murieron...
Yo le pongo fichas al buen estado de los capacitores.

Era muy frecuente que a esos se le hiciera algo parecido en color, consistencia y aspecto una mancha de sarro en la goma que los sella, pero NO afecta
 
Bueno CHEEE no queria generar un enfrentamiento por el color de unos diodos del medioevo. :LOL: Le ponían de la tinta que había. En esa época. ni se me ocurria pensar como, ni porque le ponían colores a los diodos.
Me hicieron reir todos. Gracias. Yo tambien le pongo ficha a los capacitores Doctor.
 
Bueno, desarmé el cachivache y saqué capacitores y diodos.
En los diodos no se puede leer absolutamente nada, en ninguno de ellos, pero son casi iguales a la ultima foto de @Rorschach ....y las patas son durísimaaaas!!! Me ha costado enderezarlas con la pinza...
Los capacitores me dan, uno de ellos 5970uF y el otro, algo de 5067uF..pero varía un poco entre lecturas. Tendré que probar de regenerarlo...:unsure: por que me parece un valor muy bajo para los estándares de la época, aunque con casi 50 años encima es normal que estén medio degenerados.
Por abajo los capacitores están impecables, sin fugas ni manchas.
 
Bueno, desarmé el cachivache y saqué capacitores y diodos.
En los diodos no se puede leer absolutamente nada, en ninguno de ellos, pero son casi iguales a la ultima foto de @Rorschach ....y las patas son durísimaaaas!!! Me ha costado enderezarlas con la pinza...
Los capacitores me dan, uno de ellos 5970uF y el otro, algo de 5067uF..pero varía un poco entre lecturas. Tendré que probar de regenerarlo...:unsure: por que me parece un valor muy bajo para los estándares de la época, aunque con casi 50 años encima es normal que estén medio degenerados.
Por abajo los capacitores están impecables, sin fugas ni manchas.

Mas chatarra (Mugre) para guardar :giggle::giggle::giggle::giggle::giggle:
 
9 de Junio de 1988: el día que sufrió un incendio Luis Alberto Spinetta junto a sus músicos en mi ciudad natal.

Habiendo sido ayer el aniversario del nacimiento del "Flaco", como se lo conocía, es que me atrevo a contar una historia que muchos pueden desconocer.

El 9 de Junio de 1988 yo asistía como cualquier otro día común a la escuela técnica IPET N°4 "Nicolás Avellaneda" o más conocida como Escuela del Trabajo. Tenía en ese entonces 15 años y comenzaba a forjar mis primeros conocimientos en esta apasionante especialidad de electrónica. Como en toda pequeña localidad como la mía (Marcos Juárez, al sudeste de la provincia de Córdoba, casi al límite con provincia de Santa Fé), cuando sonaba alguna sirena, todos los curiosos salíamos a ver lo que no seguidas veces sucede (a diferencia de localidades más grandes). Esa vez, al comenzar a sonar el prolongado llamado de los bomberos, nuestra actitud no fue diferente. El asombro fue que el siniestro era cerca de donde nosotros estábamos. Tal fue la curiosidad, que hasta los maestros nos dejaron ir a ver el espectáculo, reflexionando años después que fue una mala idea y consejo desde ellos dejarnos ir como curiosos, dado que la escuela estaba al borde de una ruta nacional (N° 9) muy transitada en ese entonces (posibilidad de atropellos) y podíamos entorpecer el normal desempeño necesario de los propios bomberos con nuestra curiosidad.

No eran tiempos ni de celulares, ni de internet, ni que las noticias corrieran tan rápido como ahora, tampoco. Para ponerlos en contexto y rememorarles un poco mis costumbres de esa época:

1) Por la ubicación de la ciudad y su geografía, no nos era fácil captar las emisiones de FM de otras localidades, ya que a esa época no existían emisoras locales. Solo era común escuchar un circuito cerrado de música, cuyo cableado era literalmente una telaraña por toda la ciudad y se contaba solo en algunos lugares unos parlantitos con su transformador adaptador para escuchar lo que el operador de turno decidía poner. Para los adolescentes, eso era un embole, ya que no había más que eso y a bancarse lo que pusieran. Los que contábamos con un poco más de astucia y conocimiento, hacíamos todo tipo de artilugios como para intentar captar esas emisoras "más en serio" que podían "entrar" de afuera. Es así que solo en días fríos y húmedos, mayormente desde ciertas altas horas de la noche, "entraban" la "FM 97 Especial" y la "FM 100", ambas de Rosario. No lo hacían siempre ambas, ni con la misma calidad, sino que dependíamos de las condiciones meteorológicas. Cuando "entraban" las dos, era como tocar el mismo cielo con las manos. Después, era cuestión de esperar por una transmisión libre de ruidos, la que era generalmente bien pasada la madrugada, con el dedo cerca del REC del grabador y con un TDK virgen y puesto a cero, ya que no existían ni el mp3, ni el CD, ni el streaming, ni nada de eso. Había que buscar la primicia de conseguir ese lindo tema que escuchábamos en el único boliche de la ciudad, al que habíamos comenzado a ir a su matiné (los viernes, ya que los sábados eran para los más grandes). SAO SAO era el boliche. Muchas veces conseguíamos la primicia de tema "pisado" por el operador de la emisora (término que se utiliza para describir que mientras lo pasan, le hablan o le superponen la identificación de la emisora). El que conseguía la primicia sin "pisar", ya era de otro nivel.

Así fue que varios nos hacíamos unos manguitos con las grabaciones a amigos / as de esos temas, ya que hacerse de una colección original era imposible desde lo económico. Al ver hoy que todo está al alcance de todos y prácticamente sin costo, me hace reflexionar lo duro que era completar alguna colección de vinilos, CDs, etc., en esa época.

2) Las PC ni existían. Solo contábamos en la escuela con 2 RadioShack que valieron lo que 2 Renault Coupé Fuego GTX de la época, según comentarios reiterados del propio docente de computación. Para colmo, en una ocasión me pasó con ellas algo como en la tira de Los Simpsons: nos sentaban de a turnos de a dos frente a cada máquina, de modo que pudiésemos practicar lo enseñado. Había tocado ese día la función SCROLL, pero con mi desconocimiento que mi compañero era epiléptico. Tras ejecutar yo con destreza un par de veces esa función, mi compañero quedó inmóvil y al poco instante se desploma debajo de la mesa de la RadioShack. Ya en el suelo, comenzó el pobre a retorcerse y a convulsionar, entrando como un rayo el docente (que estaba advertido del problema por los padres del muchacho) y le mandó la mano a la boca para evitar que se tragara la lengua con la convulsión. Yo quedé helado y sorprendido. No entendía nada.

Recuerdo que la primera PC que llegó a la escuela, fue una XT (no estoy seguro si así se definía) y con solo disquetera de 5 1/4". No poseía disco rígido. Había que cargar primeramente el sistema operativo desde la misma disquetera y, acomodándose con 640K (que no recuerdo si eran totales o lo que quedaba luego para programar). Fue recién en 1991.

En 1992 (año en que me recibo de técnico electrónico), aparecieron las primeras AT, ya con pequeños discos de 4 MB, luego, 10, 20 y 30 MB (las más evolucionadas).

Recién en 1993, empezaba a escucharse de internet, con el empleo del desaparecido Netscape. Lograr velocidades de transferencia de 1 a 2KB/seg era ya todo un logro, con los módems US Robotics (el que podía). Normal era bajar a unos pocos cientos de Bytes/seg y no mucho más.

Toco comenzaba a acelerarse... Me tocó tener y vivir las épocas de las microcomputadoras (conectadas a un TV, su gran mayoría). Fui poseedor de una Sinclair CZ1000 (con expansor de memoria de 2K base a 16K ya ampliada) con adaptación a Joystick. Ajustaba el volúmen del grabador a 3/4, para monitorizar y asegurar que se grabaran los juegos, relojeando el grosor de las líneas en la TV. Luego, salté a una TK90X 16K, con la que no podía disfrutar mucho, ya que los mejores juegos venían para 32K o 48K. Pensar que mi viejo pospuso rectificar el motor de una pick up, para darme el gusto con esa microcomputadora (para tener una idea de lo que valían).

3) El celular tampoco existía, ni la selfie, ni nada de redes sociales. Era darnos el palmazo de amigos y vernos la cara (o rompérnosla!!! :facepalm:).

4) En el año 1990, hice radio. No existía software de manejo integral, como hoy. Todo era a pedal, con una consola potenciada marca IONIC de 600W, una vieja casetera de un lado, un estropeado walkman del otro, una ruidosa WINCO y mucha destreza para intentar mezclar para que coincidieran los golpes de graves al unísono entre temas. Todos los días era preparar y rebobinar casettes, dejando acomodado pronto al inicio de cada tema con la ayuda de una lapicera BIC. ¿Virtual DJ? ¿Qué era eso? :oops:.

Fue así que en ese incendio y sin distanciamiento por COVID de por medio, pude ver al Flaco probando su pequeña guitarra negra (sin clavijeros) a 1 metro de mí, con sus dedos negros de hollín por el desafortunado evento y con las uñas tan cortas que no parecían de un guitarrista de su talla.

Reinaba un silencio sepulcral, que ninguno de nosotros los curiosos quiso romper. Solo atinamos a murmurar y muy por lo bajo entre nosotros lo sorprendente del daño en los equipos. Recuerdo nunca haber visto tantos parlantes de 15 o más pulgadas, muy raros de ver por cierto en esa época, ya que eran más comunes los de 12" para abajo. También me sorprendió la consola de sonido (enorme, por cierto), cuyo técnico sacaba completo los deslizantes hacia arriba, con toda la circuitería asociada al canal, con una suerte de peine de conexión hacia la placa principal que unificaba todos los canales. Era como retirar completo cada canal desde una bahía dispuesta para cambios rápidos (si así sirve el término para entenderlo gráficamente).

De ese hecho, no hubo selfies, ni muchos registros fotográficos, ni audios y en simultáneo a como nos tiene mal acostumbrados hoy los medios de comunicación. Eran tiempos donde la primicia valía y mucho. No todos la tenían. Los derechos de autor protegían un poco más las cosas, que lo que lo hacen hoy. No existía la inmediatez de las cosas. Todo sucedía a menor velocidad, como en cámara lenta y, permitía que no todos tuviesen acceso a todo y en simultáneo, como hoy.

Espero les haya gustado esta historia real.

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Aquí un enlace a buena parte de la historia:


De ese enlace, a las personas mencionadas como Javier Guerini, Daniel Sciángula y Ricardo "Turco" Tormos, los conozco a todos. De hecho, El "Turco" Tormos fue excelente operador del boliche al que yo asistía con ansias cada fin de semana para ver a las muchachas. Un ecualizador Alesis M-EQ 230 que tengo, me lo ha vendido él. De Javier, fui compañero de primaria de Cristian, su hermano menor (también guitarrista). A Daniel lo conocí tiempo después, por haberme involucrado personalmente en la recuperación y reparación de un equipo de los bomberos muy añejo, que sistematizaba todos los eventos de convocatoria y preparado de dotaciones del cuartel. Quien sacó las fotos es Hugo Cappoduro, también amigo, fotógrafo y músico, a quien supe repararle varios equipos de él y su hijo (ya que no quieren que otro que no sea yo los toque).
 
Última edición:
9 de Junio de 1988: el día que sufrió un incendio Luis Alberto Spinetta junto a sus músicos en mi ciudad natal.

Habiendo sido ayer el aniversario del nacimiento del "Flaco", como se lo conocía, es que me atrevo a contar una historia que muchos pueden desconocer.

El 9 de Junio de 1988 yo asistía como cualquier otro día común a la escuela técnica IPET N°4 "Nicolás Avellaneda" o más conocida como Escuela del Trabajo. Tenía en ese entonces 15 años y comenzaba a forjar mis primeros conocimientos en esta apasionante especialidad de electrónica. Como en toda pequeña localidad como la mía (Marcos Juárez, al sudeste de la provincia de Córdoba, casi al límite con provincia de Santa Fé), cuando sonaba alguna sirena, todos los curiosos salíamos a ver lo que no seguidas veces sucede (a diferencia de localidades más grandes). Esa vez, al comenzar a sonar el prolongado llamado de los bomberos, nuestra actitud no fue diferente. El asombro fue que el siniestro era cerca de donde nosotros estábamos. Tal fue la curiosidad, que hasta los maestros nos dejaron ir a ver el espectáculo, reflexionando años después que fue una mala idea y consejo desde ellos dejarnos ir como curiosos, dado que la escuela estaba al borde de una ruta nacional (N° 9) muy transitada en ese entonces (posibilidad de atropellos) y podíamos entorpecer el normal desempeño necesario de los propios bomberos con nuestra curiosidad.

No eran tiempos ni de celulares, ni de internet, ni que las noticias corrieran tan rápido como ahora, tampoco. Para ponerlos en contexto y rememorarles un poco mis costumbres de esa época:

1) Por la ubicación de la ciudad y su geografía, no nos era fácil captar las emisiones de FM de otras localidades, ya que a esa época no existían emisoras locales. Solo era común escuchar un circuito cerrado de música, cuyo cableado era literalmente una telaraña por toda la ciudad y se contaba solo en algunos lugares unos parlantitos con su transformador adaptador para escuchar lo que el operador de turno decidía poner. Para los adolescentes, eso era un embole, ya que no había más que eso y a bancarse lo que pusieran. Los que contábamos con un poco más de astucia y conocimiento, hacíamos todo tipo de artilugios como para intentar captar esas emisoras "más en serio" que podían "entrar" de afuera. Es así que solo en días fríos y húmedos, mayormente desde ciertas altas horas de la noche, "entraban" la "FM 97 Especial" y la "FM 100", ambas de Rosario. No lo hacían siempre ambas, ni con la misma calidad, sino que dependíamos de las condiciones meteorológicas. Cuando "entraban" las dos, era como tocar el mismo cielo con las manos. Después, era cuestión de esperar por una transmisión libre de ruidos, la que era generalmente bien pasada la madrugada, con el dedo cerca del REC del grabador y con un TDK virgen y puesto a cero, ya que no existían ni el mp3, ni el CD, ni el streaming, ni nada de eso. Había que buscar la primicia de conseguir ese lindo tema que escuchábamos en el único boliche de la ciudad, al que habíamos comenzado a ir a su matiné (los viernes, ya que los sábados eran para los más grandes). SAO SAO era el boliche. Muchas veces conseguíamos la primicia de tema "pisado" por el operador de la emisora (término que se utiliza para describir que mientras lo pasan, le hablan o le superponen la identificación de la emisora). El que conseguía la primicia sin "pisar", ya era de otro nivel.

Así fue que varios nos hacíamos unos manguitos con las grabaciones a amigos / as de esos temas, ya que hacerse de una colección original era imposible desde lo económico. Al ver hoy que todo está al alcance de todos y prácticamente sin costo, me hace reflexionar lo duro que era completar alguna colección de vinilos, CDs, etc., en esa época.

2) Las PC ni existían. Solo contábamos en la escuela con 2 RadioShack que valieron lo que 2 Renault Coupé Fuego GTX de la época, según comentarios reiterados del propio docente de computación. Para colmo, en una ocasión me pasó con ellas algo como en la tira de Los Simpsons: nos sentaban de a turnos de a dos frente a cada máquina, de modo que pudiésemos practicar lo enseñado. Había tocado ese día la función SCROLL, pero con mi desconocimiento que mi compañero era epiléptico. Tras ejecutar yo con destreza un par de veces esa función, mi compañero quedó inmóvil y al poco instante se desploma debajo de la mesa de la RadioShack. Ya en el suelo, comenzó el pobre a retorcerse y a convulsionar, entrando como un rayo el docente (que estaba advertido del problema por los padres del muchacho) y le mandó la mano a la boca para evitar que se tragara la lengua con la convulsión. Yo quedé helado y sorprendido. No entendía nada.

Recuerdo que la primera PC que llegó a la escuela, fue una XT (no estoy seguro si así se definía) y con solo disquetera de 5 1/4". No poseía disco rígido. Había que cargar primeramente el sistema operativo desde la misma disquetera y, acomodándose con 640K (que no recuerdo si eran totales o lo que quedaba luego para programar). Fue recién en 1991.

En 1992 (año en que me recibo de técnico electrónico), aparecieron las primeras AT, ya con pequeños discos de 4 MB, luego, 10, 20 y 30 MB (las más evolucionadas).

Recién en 1993, empezaba a escucharse de internet, con el empleo del desaparecido Netscape. Lograr velocidades de transferencia de 1 a 2KB/seg era ya todo un logro, con los módems US Robotics (el que podía). Normal era bajar a unos pocos cientos de Bytes/seg y no mucho más.

Toco comenzaba a acelerarse... Me tocó tener y vivir las épocas de las microcomputadoras (conectadas a un TV, su gran mayoría). Fui poseedor de una Sinclair CZ1000 (con expansor de memoria de 2K base a 16K ya ampliada) con adaptación a Joystick. Ajustaba el volúmen del grabador a 3/4, para monitorizar y asegurar que se grabaran los juegos, relojeando el grosor de las líneas en la TV. Luego, salté a una TK90X 16K, con la que no podía disfrutar mucho, ya que los mejores juegos venían para 32K o 48K. Pensar que mi viejo pospuso rectificar el motor de una pick up, para darme el gusto con esa microcomputadora (para tener una idea de lo que valían).

3) El celular tampoco existía, ni la selfie, ni nada de redes sociales. Era darnos el palmazo de amigos y vernos la cara (o rompérnosla!!! :facepalm:).

4) En el año 1990, hice radio. No existía software de manejo integral, como hoy. Todo era a pedal, con una consola potenciada marca IONIC de 600W, una vieja casetera de un lado, un estropeado walkman del otro, una ruidosa WINCO y mucha destreza para intentar mezclar para que coincidieran los golpes de graves al unísono entre temas. Todos los días era preparar y rebobinar casettes, dejando acomodado pronto al inicio de cada tema con la ayuda de una lapicera BIC. ¿Virtual DJ? ¿Qué era eso? :oops:.

Fue así que en ese incendio y sin distanciamiento por COVID de por medio, pude ver al Flaco probando su pequeña guitarra negra (sin clavijeros) a 1 metro de mí, con sus dedos negros de hollín por el desafortunado evento y con las uñas tan cortas que no parecían de un guitarrista de su talla.

Reinaba un silencio sepulcral, que ninguno de nosotros los curiosos quiso romper. Solo atinamos a murmurar y muy por lo bajo entre nosotros lo sorprendente del daño en los equipos. Recuerdo nunca haber visto tantos parlantes de 15 o más pulgadas, muy raros de ver por cierto en esa época, ya que eran más comunes los de 12" para abajo. También me sorprendió la consola de sonido (enorme, por cierto), cuyo técnico sacaba completo los deslizantes hacia arriba, con toda la circuitería asociada al canal, con una suerte de peine de conexión hacia la placa principal que unificaba todos los canales. Era como retirar completo cada canal desde una bahía dispuesta para cambios rápidos (si así sirve el término para entenderlo gráficamente).

De ese hecho, no hubo selfies, ni muchos registros fotográficos, ni audios y en simultáneo a como nos tiene mal acostumbrados hoy los medios de comunicación. Eran tiempos donde la primicia valía y mucho. No todos la tenían. Los derechos de autor protegían un poco más las cosas, que lo que lo hacen hoy. No existía la inmediatez de las cosas. Todo sucedía a menor velocidad, como en cámara lenta y, permitía que no todos tuviesen acceso a todo y en simultáneo, como hoy.

Espero les haya gustado esta historia real.

Ver el archivo adjunto 277208

Ver el archivo adjunto 277209

Ver el archivo adjunto 277210

Ver el archivo adjunto 277211

Ver el archivo adjunto 277212

Aquí un enlace a buena parte de la historia:


De ese enlace, a las personas mencionadas como Javier Guerini, Daniel Sciángula y Ricardo "Turco" Tormos, los conozco a todos. De hecho, El "Turco" Tormos fue excelente operador del boliche al que yo asistía con ansias cada fin de semana para ver a las muchachas. Un ecualizador Alesis M-EQ 230 que tengo, me lo ha vendido él. De Javier, fui compañero de primaria de Cristian, su hermano menor (también guitarrista). A Daniel lo conocí tiempo después, por haberme involucrado personalmente en la recuperación y reparación de un equipo de los bomberos muy añejo, que sistematizaba todos los eventos de convocatoria y preparado de dotaciones del cuartel. Quien sacó las fotos es Hugo Cappoduro, también amigo, fotógrafo y músico, a quien supe repararle varios equipos de él y su hijo (ya que no quieren que otro que no sea yo los toque).
¿Ustedes le decían "el Flaco" ? :rolleyes: :unsure: :LOL: Nosotros le decíamos menos respetuosamente "Colador" ( lo veíamos bastante a menudo por CABA o Ituzaingó Norte , incluso en algún recital de invierno )
 
Ayer me puse a desarmar una vieeeeeja plaqueta que hice cuando tenía 15 años...y estaba horrible aunque funcionaba a la perfección. Recuperé los diodos BY127, un transistor TIP110, un 2N3055 Motorola 100% original (en esa época no existían los truchos) y capacitor Siemens de 1000uF por 40V. Todos los semiconductores está perfectos, y los BY127 tienen entre sí una diferencia máxima de 8mV en la tensión ánodo-cátodo 🥳.
componentes-recuperados-1978.jpg
El capacitor aún no lo mido así que no sé como se encuentra, pero todo lo demás está perfectamente bien salvo los terminales un poco recortados, y dado que tengo un par de MJ2955 originales de Motorola...algo inventaré en algún momento.

Aún lamento haber perdido los seis 2N3055 homotaxiles de RCA....a saber donde fueron...
 
Que buen relato diegomj1973 !!!!!, Lo que contás es casi como yo lo he vivido, aunque tengo unos años más que vos (soy 1966)
La guitarra que usaba el Flaco era esta Steinberg:
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